Las fuerzas de seguridad federales desplegaron esta tarde un fuerte operativo de seguridad en las inmediaciones del Congreso para garantizar el cumplimiento del protocolo antipiquetes durante una nueva marcha de jubilados.

Efectivos de la Gendarmería obligaron a los manifestantes a subir a la vereda de la Plaza Congreso, donde los adultos se movilizaban guarecidos de la lluvia con paraguas y ropa de abrigo.